Los hábitos de consumo de los millennials, quienes se enfocan en llevar un estilo de vida saludable, han cambiado la forma de comprar de todos los consumidores.
Se les consideraba solo un grupo demográfico más, pero su inclusión en la vida laboral y su cada vez mayor poder adquisitivo les han convertido en una generación con gran influencia en las tendencias de consumo.
Ha sido tal su impacto en el consumidor mexicano en general que los supermercados y las cadenas de comida rápida ofrecen ahora opciones para una alimentación más sana, y hasta las dependencias gubernamentales han implementado programas enfocados en una vida saludable.
El enfoque de los millennials en la ecología y el bienestar físico y emocional se refleja en sus decisiones de compra, pues al adquirir bienes y servicios ven más allá de la utilidad y precio de los mismos, analizando sus procesos de producción y el impacto de estos en el medio ambiente.
Preocupados por su salud, sus hábitos alimenticios difieren de los de sus padres, y ahora adquieren más productos naturales y poco procesados, dedicando más tiempo a la cocina.
Conscientes de su huella ecológica, buscan reducir las emisiones de contaminantes de los vehículos de transporte, por ejemplo, y recurren a proveedores locales, a las compras por internet o a las tiendas y supermercados que les queden más cerca.
Estas actitudes están siendo adoptadas cada vez más por los consumidores en general; por ello, las empresas grandes y pequeñas han tomado nota.
Considerando las preocupaciones e inquietudes de este mercado, las empresas ahora buscan satisfacer sus necesidades apegándose a ese nuevo código de valores, modificando sus ofertas de productos y servicios.
Entérate más sobre las acciones emprendidas por las compañías alimentarias con esta infografía: